La barbarie ha dejado esta vez al menos una veintena de personas muertas y casi sesenta heridas. Tanto dolor y crueldad infringida a un grupo de niños y jóvenes y al corazón de una ciudad trabajadora no hace sino demostrar la absoluta sinrazón de los autores e instigador del atentado.

UGT envía su solidaridad y afecto a las familias y amigos de las víctimas, a las gentes de Manchester, a los y las trabajadoras de los servicios sanitarios, de seguridad, bomberos y a todas y todos los que con tanta profesionalidad y corazón han participado en las difíciles tareas de emergencia tras el atentado.

Todas y todos los afiliados a UGT estamos hoy aún más cerca de nuestras compañeras y compañeros del Trade Union Congress, TUC, diciendo que esta barbarie no tiene cabida en el mundo justo y libre que la clase trabajadora se esfuerza en construir todos los días. Estamos de corazón y en la acción con nuestros hermanos y hermanas británicas para seguir defendiendo la democracia y la tolerancia como los mejores antídotos contra la tiranía del odio.