La depresión asociada al trabajo  en Europa

La seguridad y salud en el trabajo , no solo se afronta desde una perspectiva puramente social y ético-normativa sino, cada vez más,  desde el punto de vista económico, de manera que se manifiesten igualmente los enormes costes que tiene para las empresas y, en general, para la economía de una sociedad, no incluir en su sistema de gestión una política de prevención eficaz de todos los riesgos derivados del trabajo para las personas La búsqueda de la mayor seguridad y salud posible en el trabajo no es sólo, pues, un deber jurídico, y ético, sino una decisión eficiente en el plano económico. De ahí no sólo la necesidad, sino la conveniencia de integrar esta perspectiva en el sistema de gestión de las empresas de forma normalizada.

Si ese punto de vista renovado se proyecta para todos los temas relativos a la seguridad y salud en el trabajo, con mayor énfasis se hace respecto de la llamada salud mental de los trabajadores.

En esta nueva tendencia, se ha creado “Target. Depresión en el Lugar de  rabajo”1.

Target es una nueva iniciativa para ayudar a los profesionales de los “recursos humanos” para abordar los efectos nocivos que tiene la depresión en el lugar de trabajo. Para ello, ha elaborado pautas, guías o recomendaciones en torno a las mejores herramientas que, de forma concreta y práctica, permitan a las personas responsables de la gestión de las diversas empresas identificar mejor, y de forma precoz en lo posible, situaciones de depresión, apoyando a los trabajadores que precisen intervención y facilitando que se mantengan saludables los ambiente de trabajo. Asimismo, fomentan la ejecución práctica o implementación de las políticas y buenas experiencias que no sólo aseguren la ausencia de enfermedades mentales, sino que, más bien, promuevan la buena salud mental en el lugar de trabajo favoreciendo al mismo tiempo la productividad laboral.

La depresión en el trabajo y su impacto económico.

Nos recuerda el Informe que la Organización Mundial de la Salud (OMS), también la OIT, lleva años avisando o alertando de que la salud mental es ya, y lo será todavía mucho más en el inmediato futuro, la principal causa de absentismo en el trabajo.

La depresión en las personas adultas y en edad de trabajar, disminuye su capacidad para concentrarse y trabajar de forma productiva, además de afectar de manera muy negativa a su salud. La depresión se ha establecido como la principal causa de discapacidad en el mundo, afectando a 350 millones de personas. De modo que, en Europa, en torno al 87% de los casos de depresión se producen en los adultos en edad de trabajar, por lo que cada año hasta un 10% de las personas experimentan un episodio depresivo.

Por lo que se refiere a los costes de la depresión, llama la atención el significativo gasto que representa para la economía de un país, aunque esos costes no siempre se traduzcan en pérdidas directas en las cuentas de resultados de las empresas. Así, pone como ejemplo el año 2010 para el que se estima que la depresión le costó a la economía europea unos 92 mil millones de euros, de los cuales aproximadamente el 60 por cien serían “costes indirectos”, y entre ellos están, cómo no, los derivados de la pérdida de productividad que suponen los días de baja.

La depresión y el absentismo laboral.

Para examinar el impacto de la depresión en el lugar de trabajo y el coste personal y económico posterior, se tomó el Estudio encargado a la Asociación Europea de Depresión (EDA), a la que se pidió que analizará el impacto de la depresión laboral en Europa en el año 2012.

El cuestionario realizado, de alcance europeo, encuestó, según se dice, a 7.000 trabajadores y directivos. En él se pone de manifiesto que:

• 1 de cada 10 trabajadores se ausenta del trabajo debido a la depresión,

• Con 36 días de trabajo perdidos por episodio depresivo,

• Que asciende a un total de 21.000 días en esta población.

• El tiempo necesario de baja laboral por depresión o ansiedad u otros problemas comunes de salud mental es mayor que por otras razones de salud.

El absentismo laboral o la reducción de la productividad del trabajador por causa de la depresión no afecta de manera aislada, no es un problema meramente individual.

Al contrario, tiene una dimensión colectiva, de ahí que concierna a la organización, pues queda claro que, por lo general, dicha situación de desajuste puede influir en el resto de trabajadores de la empresa, generando estrés, ansiedad, una mayor rotación del personal, etc. Este desajuste crea una tensión adicional del trabajador y la posibilidad de un incremento del número de incidentes y de accidentes en el trabajo. Además, de su impacto negativo en las relaciones sociales como pueden ser del trabajador con su familia, amigos y con los propios compañeros de trabajo.

Los riesgos psicosociales, como pueden ser el estrés relacionado con el trabajo y la tensión en el trabajo, antesala de la depresión laboral, son ya un problema muy relevante no sólo para la salud laboral sino para la salud pública en general. Por tanto, debe hacerse un notable esfuerzo para su más eficaz prevención.

El impacto de la salud mental sobre las habilidades de un trabajador.

La depresión  y el absentismo tienen un impacto muy significativo sobre la calidad de vida y la capacidad de funcionar profesionalmente y socialmente para el trabajador. Altera la concentración, produce indecisión y falta de memoria, por lo que el nivel de rendimiento del trabajador se ve reducido hasta en un 94% por debajo del nivel esperado durante un episodio depresivo.

Los beneficios de hacer frente a la depresión.

La salud y la seguridad, así como el bienestar de los trabajadores en un entorno de trabajo, son aspectos de fundamental importancia, tanto para los propios trabajadores como para los responsables, donde un ambiente de trabajo saludable puede llegar a ocasionar un incremento en la productividad, de la competitividad, etc. Por ello, para crear un entorno de trabajo saludable se debe tener en cuenta la forma en la que la relación laboral puede influir sobre la salud mental de los trabajadores así como la manera en la que se puede actuar para implantar mecanismos o medidas de actuación para un trabajo “saludable”.

Por tanto, un ambiente de trabajo saludable es aquel donde el trabajador no siente la necesidad de ocultar sus sentimientos, donde no pueden verse dañadas sus perspectivas de carrera profesional por las circunstancias que el trabajador pueda estar viviendo por las consecuencias de la depresión y donde son apoyados aquellos trabajadores que presentan signos de la enfermedad. En este entono de trabajo, se podrá iniciar un tratamiento de manera temprana de aquellos trabajadores afectados en su salud mental facilitando el proceso de recuperación, porque el trabajo es beneficioso tanto para la salud física como mental del trabajador. De modo que, el tratamiento de la depresión es más exitoso cuando la condición se diagnostica y se trata de manera temprana.

Un reciente proyecto financiado por la agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo(EU-OSHA), determina que el coste para Europa de la depresión relacionada con el trabajo se estima en 617 mil millones de euros al año.

El logro de un entorno de trabajo saludable se refleja mediante la adopción de  medidas sencillas para prevenir y mejorar la identificación temprana de los problemas de salud mental en el lugar de trabajo.

Acciones sobre la depresión en el lugar de trabajo.

En la mayoría de los países de Europa existen leyes nacionales e incluso locales que exigen a los empresarios garantizar un mínimo de protección a los trabajadores sobre la salud mental que puedan derivar en enfermedades, ya sea como una ley independiente o bien incorporada con su ley de salud general. La concienciación sobre la necesidad de actuar con respecto a los problemas de salud mental, han llevado a que un número de miembros del Parlamento Europeo recomiendan políticas y leyes que apoyen mejores condiciones de trabajo. Asimismo, sugieren específicamente cambios inminentes en la Estrategia Europea de Seguridad y Salud en el Trabajo (2013- 2020) donde se debe de reconocer la necesidad de abordar las deficiencias en la política sobre la salud mental y la depresión en el trabajo. 

Principio: “Respeto y Resultados”

MENOS

MÁS

Gestionar personas

Guiando a las personas

El uso de la mala conducta de otros como una excusa

Respeto y Resultados

Pedir permiso

El pedir “perdón”

Señalar con el dedo

Permitir errores

Contar

Escuchar

Pensamiento solitario

Piensa como una empresa.

Buen trabajo, buena salud

 

Prevención

Intervención

Rehabilitación

Educación y capacitación

Formación general para concienciar a la fuerza de trabajo de las cuestiones de salud mental, estilo de vida saludable y como evitar el estigma.

Formación de gestores de personas a reconocer los signos de peligro e indicación de los servicios de apoyo.

Guía para los gerentes y trabajadores sobre el retorno efectivo al trabajo.

Evaluación

Evaluación de riesgos de trabajo y el cambio para controlar los riesgos psicosociales.

Autoritarias de estrés para identificar a las personas y7o unidades de negociación en riesgo de daño.

Acceso al servicio de salud en el trabajo para la evaluación de los trabajadores enfermos y asesoramiento en la gestión

Apoyo práctico

Adopción de un modelo de trabajo flexible para ayudar a buscar el equilibrio en el trabajo y los compromisos sociales

Disponibilidad de un programa de asistencia confidencial al empleado

Prestación de servicios de apoyo psicológico para el personal con enfermedades mentales

 

Este texto es un resumen del Informe del “Foro de Liderazgo de Recursos Humanos (2014)”:

“La Depresión asociada al trabajo en Europa: El punto de vista de la Gestión Empresarial” que se encuentra recogido en el Anuario 2014 elaborado por UGT-CEC: http://www.fspugt.es/images/pdfs/anuario_salud.pdf


1 http://targetdepression.com/

2 Vid. HASSARD, J.; TEOH, K; COX, T.; DEWE, P.; COSMAR, M.; GRÜNDLER, R.; FLEMMING,D.; COSEMANS, B.; Y VAN DEN BROEK, K.: “Calculating the costs of work-related stress and psychosocial risks. European Risk Observatory Literature Review”, European Agency for Safety and Health at Work, 2013.(consulta)