UGT reclama más información y medidas de prevención en colectivos de empleados públicos que manejan sustancias peligrosas
La OMS reconoce, a través de su Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), que la mitad de cancerígenos reconocidos están presentes en el trabajo.
La Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos (FeSP) de UGT ha reiterado su petición a las administraciones para que extremen las medidas de prevención en aquellos colectivos, como el sanitario, que manejan medicamentos citostáticos, anestésicos y otras sustancias peligrosas. La exposición continuada a estos agentes cancerígenos usados para el tratamiento o diagnóstico de enfermedades -algunos indispensables al no existir sustitutos- entraña un grave riesgo para la salud del trabajador. UGT ha denunciado la situación de indefensión que sufren los profesionales sanitarios quienes, en muchos casos, carecen de medidas de protección adecuadas cuando manejan estos agentes peligrosos, a pesar de que la ley de prevención de riesgos laborales obliga a los empleadores a garantizar un adecuado nivel de protección de la salud de los trabajadores frente a los riesgos derivados de las condiciones de su trabajo.
Los cánceres debidos a exposiciones ocupacionales son menos conocidos por la opinión pública, aunque el Registro, Evaluación, Autorización y Restricción de Sustancias y Mezclas Químicas (REACH) tiene identificadas más de 50.000 sustancias presentes en los ambientes de trabajo capaces de provocar cáncer, mutaciones genéticas y/o daños en la reproducción o al feto. La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en sus informes y monografías admite que la mitad de los agentes cancerígenos reconocidos por ella están presentes en los centros de trabajo y un significativo porcentaje del total de tumores tiene un origen laboral.
El sindicato ha reivindicado un mayor compromiso por parte de las autoridades sanitarias y de Salud Publica en la investigación, notificación y reconocimiento de las enfermedades profesionales, solo así se podrán tomar medidas de prevención e incorporar nuevas patologías al Anexo I del Real Decreto 1299/ 2006, de Enfermedades Profesionales.
UGT es consciente de la dificultad, pero también de la necesidad de adoptar medidas efectivas que tienen un impacto muy positivo en la prevención de estas patologías. Concienciar a las administraciones y a los empleados públicos de los riesgos a los que están expuestos es fundamental. Por eso, UGT, además de exigir que se cumpla la ley y se pongan en marcha medidas de prevención para evitar futuros cánceres, lleva años trabajando en la formación e información de los trabajadores. El sindicato ha editado publicaciones y folletos informativos, donde advierte de los riesgos a la exposición a estos agentes y sus repercusiones sobre la seguridad; ha impartido jornadas y cursos en diversos hospitales. En esta iniciativa, la organización sindical ha buscado la implicación de las administraciones a través de los gerentes, directivos y responsables de centros.