El Consejo de Ministros ha aprobado hoy el anteproyecto de ley orgánica por la que se modifica la Ley Orgánica 2/2006 de Educación, con la que se quiere derogar la LOMCE y que se enviará al Congreso para continuar su tramitación, aunque la disolución del Parlamento por la convocatoria de elecciones generales impedirá que pueda seguir adelante en esta legislatura.

UGT ha venido manifestando que este proyecto responde al compromiso adquirido por el Gobierno socialista de revertir los aspectos más lesivos y controvertidos de la LOMCE y de elaborar una nueva ley. Una ley que en su exposición de motivos establece como objetivo último reforzar la equidad y la capacidad inclusiva del sistema, y como principal eje vertebrador, la educación comprensiva.

El proyecto de ley concede importancia a diversos enfoques, como los derechos de la infancia, según lo establecido en la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas (1989); la igualdad de género, a través de la coeducación; un enfoque transversal orientado a elevar los resultados de todos los estudiantes por medio de una dinámica de mejora continua de los centros educativos y una mayor personalización del aprendizaje; un enfoque desde el desarrollo sostenible de acuerdo con lo establecido en la Agenda 2030, y una atención al desarrollo de la competencia digital de los estudiantes de todas las etapas educativas.

UGT, que apoya las líneas generales del proyecto, ya que en su conjunto responden a reivindicaciones que nuestra organización viene manifestando desde el debate previo a la LOMCE, valora las modificaciones introducidas en el articulado donde se fomenta la equidad y la igualdad de oportunidades.

El texto recupera aspectos significativos para preservarlos, como son una escolarización más equilibrada entre las dos redes, la evaluación continua, la desaparición de reválidas e itinerarios, una titulación única al finalizar la enseñanza obligatoria, la organización por ciclos en Primaria, la no publicación de resultados, la no especialización de los centros, la participación de toda la comunidad educativa de los centros, la flexibilización de la FP, la potenciación del carácter educativo de la Educación Infantil de 0 a 6 años y su regulación.

Nuestra organización considera que, debido a la situación política y la falta de tiempo para la tramitación de esta nueva ley, cualquier medida que haga posible paliar los efectos de la LOMCE será bien acogida por el sindicato, siendo nuestro último objetivo la aprobación de una nueva ley que derogue la LOMCE.

No obstante, la inestabilidad política no debería impedir la negociación y la puesta en marcha de medidas que mejoren las condiciones laborales del profesorado.

Por otro lado, UGT expresa su preocupación en el ámbito de becas y ayudas al estudio ya que la no aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, en los que se contemplaba una subida del 10% en este concepto, puede generar un recorte en las cantidades y una inseguridad en los beneficiarios.