UGT CLM considera un paso adelante en el Estado del Bienestar la aprobación de una renta mínima vital para las familias más vulnerables
El sindicato pide ahora máxima coordinación entre las administraciones para que esta renta mínima llegue a quien la necesita y para que se pueda complementar con las prestaciones asistenciales regionales o con el desempleo.
UGT CLM valora la aprobación de este viernes en el Consejo de Ministros de una renta mínima vital de urgencia destinada a cubrir las necesidades básicas de las familias que no lleguen a unos mínimos de renta, cuya situación se ha visto agravada por la crisis económica y social del COVID-19.
Para UGT CLM esto supone un paso adelante en el Estado del Bienestar, desde el principio de la pandemia el sindicato había pedido extender la protección a todos los colectivos desfavorecidos de manera urgente, especialmente a las personas sin ingresos y sin acceso a prestaciones. “La Renta Mínima Vital aprobada hoy supone un alivio para muchos hogares, no es el ingreso mínimo vital que queríamos por ley, pero es un gran paso para impulsar una salida de la crisis más rápida y no incrementar los niveles de pobreza social ya dramáticos”, ha detallado Carmen Campoy, miembro de la Gestora de UGT CLM.
Todos los indicadores de pobreza y exclusión social en España y en CLM avalan la necesidad de esta medida. Según los últimos datos del INE correspondientes al año 2018, el 33,5% de la población de la región estaba en riesgo de pobreza o exclusión social y el 22,7% de los hogares de CLM llegaban con dificultad o con mucha dificultad a final de mes. “Por eso desde UGT CLM exigimos que haya máxima coordinación entre las administraciones para que esta renta mínima llegue a quien la necesita y para que se pueda complementar con las prestaciones asistenciales regionales o con el desempleo, siempre que no se supere el límite de renta”, explica Campoy.
Por otra parte, UGT CLM defiende que esta renta mínima vital tenga un carácter integrador, de inclusión social y de reincorporación al mercado laboral de todas las personas que ya tenían dificultades para acceder a él o que las tienen tras el COVID-19. Según la última EPA correspondiente al 1er trimestre de 2020, en CLM 52.100 hogares tienen a todos sus miembros en paro, cifra que se ha incrementado en los dos últimos años y que es necesario atajar con medidas de fomento del empleo. “Para ello no basta con una renta mínima, necesitamos más recursos humanos, orientación laboral e itinerarios de formación que faciliten la empleabilidad y permitan salir de la extrema vulnerabilidad».
UGT CLM recuerda que la renta mínima vital es un derecho subjetivo, universal y permanente mientras persista la situación de vulnerabilidad familiar y que, por tanto, nadie debería dudar de su justicia y necesidad.