El Gobierno sigue sin dar a conocer cuál es la oferta de incremento salarial que ofrece aplicar a los casi tres millones de empleados públicos los próximos tres ejercicios, hasta el final de la legislatura.

«Esperábamos más concreción puesto que el Ministerio ya nos había especificado que estaban valorando que la subida estuviera compuesta de una parte fija y otra variable en función del crecimiento del PIB esperado para los próximos años», explica Monell. Nosotros ya le habíamos indicado que nos parecía razonable vincular parte del incremento de los sueldos al PIB porque es algo que ya se ha realizado alguna vez en la Administración y es más habitual en el sector privado.

Sin embargo, se esperaba que el Gobierno presentara sus números con el objetivo de poder comenzar a debatir si estaban o no cerca de las pretensiones planteadas por los sindicatos. «Por el contrario, lo que han hecho es hablar de filosofía, de cómo sigue siendo prioritario cumplir con el déficit, por lo que sinceramente pensamos que hoy el acuerdo está más lejos que hace una semana».

Fréderic Monell, valoró el «escenario de diálogo» y explicó que el Gobierno no ha concretado un escenario económico y que necesitan ajustar «algunos números», al tiempo que se mostró «poco optimista» sobre el acuerdo si no se recupera el poder adquisitivo perdido en los últimos años, que los sindicatos cifran entre el 13% y el 20%.

El próximo martes Hacienda emplazará a los sindicatos a una nueva reunión para seguir negociando sobre este punto. UGT ha manifestado que se llevarán a cabo todas las medidas de presión al alcance de los trabajadores para que el poder adquisitivo perdido quede subsanado en un plazo de tiempo razonable.