La infancia debe ser educada sobre cómo pensar, no acerca de lo que deben pensar.

La Asamblea General de las Naciones Unidas decidió dedicar el 11 de febrero a visibilizar la necesidad de necesidad de lograr el acceso y la participación plena y equitativa en la ciencia para las mujeres y las niñas. A lo larrgo de la historia, mujeres valientes que nadaban a contracorriente han contribuido con sus investigaciones científicas al desarrollo de la humanidad.

En la actualidad, nos enfrentamos a la paradoja de que pese a que las mujeres son mayoría en la Universidad, tanto en  número de matriculaciones como índice de títulos obtenidos, éstas siguen concentrándose en las disciplinas relacionadas con las humanidades y la salud, siendo su presencia residual en las enseñanzas técnicas y científicas, lo cual condiciona necesariamente su trayectoria profesional.

¿Esta aparente preferencia femenina por las enseñanzas relacionadas con los cuidados es voluntaria? ¿En qué momento formativo las mujeres dejan de lado las matemáticas, física o química? ¿Existe un sesgo de género en las evaluaciones de las niñas en el aula que condiciona su elección? ¿Hasta qué punto contar con referentes positivos (las pioneras de la ciencia) contribuye a invertir esta Tendencia?

Esta y otras muchas preguntas son las que queremos que te hagas, al menos hoy, para así poder transformar el mundo.