UGT no ha firmado dicho Convenio, ya que en su texto recoge que las gerocultoras tendrán que dedicarse a tareas de limpieza a requerimiento de la empresa

Después de más de tres años de negociación se ha firmado el VII Convenio Marco Estatal de la Dependencia. Dicho Convenio no cuenta con el respaldo de UGT y por lo tanto no lo ha firmado. UGT considera que el texto supone un claro retroceso en las condiciones laborales de las gerocultoras, ya que contempla “que las gerocultoras podrán realizar la limpieza e higiene de utensilios, ropa y estancias, cuando en el servicio existan circunstancias que así lo requieran”.

FeSP-UGT estima que se precariza el trabajo del personal gerocultor, ya que lleva aparejada la indefensión de las trabajadoras para discutir a la empresa si las circunstancias requieren o no la realización de dichas tareas. Además la inclusión de este texto irá en detrimento de la contratación del personal de limpieza.

Aunque gerocultoras y limpiadoras estén en grupos profesionales diferentes e incluso la administración requiere cualificación específica a las gerocultoras, este convenio desvirtúa su trabajo, que debería orientarse exclusivamente a los cuidados. Esto significa una vuelta atrás para el sector de la dependencia: precisamente ahora que salimos de la crisis económica, las condiciones económicas de este convenio no mejoran las del anterior, ya que se mantiene el incremento del IPC. A esto hay que añadir que, como hemos señalado, las condiciones laborales empeoran.

Este convenio señala como mejoras la inclusión en el texto de cuestiones que serían de obligado cumplimiento para las empresas -aunque el texto del convenio no las recogiera- porque tanto las sentencias como los acuerdos alcanzados en el SIMA y en la paritaria constituyen el marco normativo para el ámbito de la dependencia.