Parece que la idea de crear el “Metaverso de Correos”, 130.000 eurazos la broma, se le ha quedado corta al presidente de Correos, currando, siempre infatigable, para superarse a sí mismo. No parece que le sea suficiente con hacer Correos proporcionando un servicio decente a la ciudadanía, con unos precios razonables y con el respeto que se merecen sus empleadas y sus empleados, cosa que no ha hecho en estos 5 años, y que es la razón por la que se lleva 200 mil euros al año más un bonus apañado para metérselo al bolsillo, sí o sí, aunque no salgan las cuentas.

Tampoco con caracterizar a Correos en el vídeo de celebración del 12 de octubre del pasado año como la organización (marcha militar incluida) que le gustaría presidir, sin disidencias ni opiniones diferentes a las suyas, sin cuadros con autonomía y criterios propios, sin otra prensa que aquella que abona con el favor de sus publirreportajes y patrocinios. A ser posible, sin organizaciones distintas a aquellas nostálgicas del sindicalismo vertical.

Sabemos que a Serrano le gustaría convertirnos en hologramas y seres virtuales destinados a decir y hacer exclusivamente aquello para lo que han sido programados, reduciendo de paso los costes ya que, de todos es sabido, unos y otros están fuera de convenio. Tanto como que desearía ser el programador de ese metaverso de Correos que pretende activar y en el que le gustaría, estamos convencidos, aparecer con una identidad digital de experto en logística; prócer de los Servicios Postales y, ahora, del país; hombre honesto y abnegado; eficiente, innovador, moderno, culto, y progresista. Desgraciadamente para él y sus palmeros, pero también para Correos, ese avatar no es capaz de disimular su incompetencia, necedad, autoritarismo, arrogancia y soberbia.

Nadie le pide a Serrano que haga país. Eso corresponde a quienes hemos elegido para representarnos en el Parlamento y en el Senado. Basta con que no desguace, dilapide y arruine el Servicio Postal que tantas generaciones de empleados y de empleadas de Correos han levantado con esfuerzo. Nada más y nada menos.

No obstante, dado que se acerca el día en el que los arcaicos postalones celebraban el día de la patrona el 12 de octubre fiesta de El Pilar y que Serrano celebra (despilfarrando el dinero de un Correos que tiene en quiebra económica) ahora con ínfulas patrióticas mediante una gran pancarta en la milla de Oro del barrio de Salamanca de Madrid queremos corresponder a la felicitación cartelera trasladando desde la mayor humildad una serie de consideraciones sobre lo que no es hacer país:

Crear un agujero de 777 millones de euros antes de impuestos en 3 años, que serán 1.100 a final de 2023, y embolsarse un bono del 20% del salario haciendo trampas con los objetivos y los resultados NO ES HACER PAÍS.
TAMPOCO ES HACER PAÍS eliminar 7.000 puestos de trabajo en tres años, que serán 10.000 al finalizar 2023, 300 de los cuales son servicios rurales, mientras se ufana de servicio vertebrador y factor de cohesión social.
Invertir 32 millones en un centro internacional, retrasar 2 años su puesta en marcha y que después de 6 meses siga sin estar a pleno funcionamiento, con un horario de 8 a 22 horas ES ALGO DISTINTO QUE HACER PAÍS.
TAMBIÉN ES DISTINTO QUE HACER PAÍS poner en marcha Correos Cargo, a sabiendas de que era un desastre anunciado, generar un agujero de explotación de 25 millones y la reclamación por parte del socio de 38 millones adicionales, en tan solo 7 meses.
Deshacerse de los profesionales de la casa mientras llena la estructura de paracaidistas de discutible competencia que, en el mejor de los casos, acaban haciendo las maletas un año después de su llegada NO PARECE QUE SEA HACER PAÍS.
TAMPOCO PARECE QUE SEA HACER PAÍS ocultar a los responsables de la soberanía popular, medios de comunicación y sociedad en general los desastrosos resultados de los tres últimos años a la vez que se gastan importantes sumas en blanquear la imagen del presidente de Correos y su gestión.
Utilizar el Servicio Postal en beneficio personal y el de sus conmilitones, malvendiendo o regalando el patrimonio de Correos para conseguir notoriedad política o hacer caja NO DEBIERA CONSIDERARSE HACER PAÍS.
TAMPOCO DEBIERA CONSIDERARSE HACER PAÍS desmantelar la estructura de Correos e improvisar cinco estructuras diferentes en cinco años, mientras intenta convencernos de que eso es el plan de transformación del operador público.
Reducir a la mínima expresión las plantillas de carterías, oficinas y centros para maquillar la cuenta de resultados, deteriorando gravemente la calidad de servicio y las condiciones del personal, mientras se dilapidan recursos económicos en consultoras, propaganda, y proyectos disparatados más propios de los grandes inventos del TBO ES LO CONTRARIO DE HACER PAÍS.
TAMBIEN ES LO CONTRARIO DE HACER PAÍS poner música a los vídeos promocionales del 12 de octubre mezclando festejo taurino, banda cuartelera y orquesta de los 50 y, además, pagar por ello.

Por todo lo anterior, esperamos que el gobierno en funciones castigue estos desmanes haciendo que Serrano aprenda, y copie 100 veces, el decálogo anterior. No obstante, como muestra de buena voluntad y aprovechando la festividad de la patrona, vamos a solicitar que la pena le sea conmutada por una propuesta de nombramiento en la Unión Europea como director de Logística de Papa Noel en Laponia